El punzonado es un método común de procesamiento de metales que funciona con diversos materiales, como acero al carbono, acero galvanizado, acero inoxidable, aluminio y cobre. Estos materiales tienen características y ventajas propias en el proceso de estampación.

En primer lugar, el acero al carbono es un material de punzonado de uso común, con buena procesabilidad y resistencia, y es adecuado para la fabricación de diversas piezas y componentes estructurales. El acero galvanizado posee excelentes propiedades anticorrosivas y es adecuado para la fabricación de productos que requieren resistencia a la corrosión, como piezas de automóviles y carcasas de electrodomésticos.

El acero inoxidable se caracteriza por su resistencia a la corrosión y a las altas temperaturas, y su atractivo aspecto, lo que lo hace ideal para la fabricación de utensilios de cocina, vajillas, decoración arquitectónica y otros productos. El aluminio es ligero, posee buena conductividad térmica y buenas propiedades de tratamiento superficial, y es adecuado para la fabricación de piezas aeroespaciales, automotrices y carcasas de productos electrónicos.

El cobre posee una buena conductividad eléctrica y térmica, y es adecuado para la fabricación de productos como conectores eléctricos, cables y radiadores. Por lo tanto, según las diferentes necesidades del producto y los requisitos de ingeniería, se pueden seleccionar los materiales adecuados para el punzonado, cumpliendo así con los requisitos de rendimiento y calidad del producto. En la práctica, la selección de materiales debe considerar exhaustivamente factores como las propiedades mecánicas, la resistencia a la corrosión, el rendimiento del procesamiento y el costo del material para garantizar un producto final con un rendimiento excelente y una alta rentabilidad.